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DOS PINCELADAS SOBRE HERVÁS


(S. G. I., Madrid, 13 de octubre de 2011)

EL CAMINO, EL DE DENTRO Y EL DE FUERA, NO TIENE FIN: LO CONSTRUYEN LOS PROPIOS PIES.


Es éste un viaje a paisajes naturales, pero también a mis paisajes interiores: imposible delimitar lo que queda a cada lado de la ventana que es mi cámara. Es éste un viaje iniciático al interior de vosotros mismos que pasa por mirar, también, al exterior.

Abrimos una puerta a los caminos que recorren las montañas de Hervás. También, y muy especialmente, a los caminos que os recorren y que quizá nunca hayáis osado hollar. Nos esperan muchos lugares nuevos. Y cada unos de vosotros descubrirá, por su cuenta, otros paisajes interiores no menos hermosos, una tierra virgen: vuestro pequeño reino privado.

FINAL DE LÍNEA


ÚLTIMA ESTACIÓN
En el andén,
vidas como vías
tendidas con urgencia.
Se volvieron confluyentes
las líneas paralelas.
Hilos cercenados,
forjados
con duro hierro.
Frágiles destinos
esparcidos
sobre raíles siniestros.
                                                                                                     (S. G. I, Madrid, 25 de julio, 2013)

El destino o Las parcas, Francisco de Goya

Para escuchar Το τραίνο φεύγει στις οκτώ, de Mikis Theodorakis, interpretado por María Farantoúri

NO NECESITO UN ANIVERSARIO



SE TI SCRIVO SOLO ADESSO…
Quédate, Señor, tu serenidad
si es para aceptar lo que cambiar no puedo.
Animal me hiciste,
la respuesta es refleja:
si me hieres, me revuelvo.
Daño colateral o error de cálculo.
Elección equivocada.
Quizá sólo un despiste.
Te fabricó a su imagen un ser imperfecto.
Negligente.
Te cansaste demasiado pronto de hilar
y cortaste.
En el tejido, un agujero.
Extirpaste sin zurcirme siquiera.
Tarde para disculpas:
el trasplante es imposible,
no existen indemnizaciones.
Me has dejado sólo una opción.
Quiero la hoja de reclamaciones

Se ti scrivo solo adesso, un motivo ci sarà.
Crece bajo mi ventana el sauce
blanco −terca cabellera cana−,
cabizbajo.
Ninguna mano complaciente
aligera ya sus ramas.
Pasó el capricho infantil
−mi edad, si preguntan,
sólo tres dedos−
Nos echan de menos en el jardín,
abuelo.
Tú tienes el tuyo de piedra:
duermes hace años
en el suelo.
Yo, a días,
no sé reemprender el vuelo
                                                                     (S. G. I, Madrid, 15 de julio, 2013)

El sacrificio de Isaac, Caravaggio

Gracias, Dios mío, por habernos creado animales. Por habernos emparentado, salvo a unos pocos más próximos al reino de los protozoos −con perdón de las amebas−, con el mono.

Para escuchar a Ligabue interpretando Lettera A G, precedida por su poema Il guscio rotto

Los verdaderos protagonistas estan aquí